Al manejar cloruro de calcio, es fundamental utilizar equipo de protección personal, como guantes y gafas, para evitar el contacto con la piel y los ojos, ya que puede causar irritación. Debe almacenarse en un lugar seco y bien ventilado, alejado de fuentes de humedad para prevenir la absorción de agua. Además, se debe evitar la inhalación del polvo y el contacto prolongado con la piel.
El cloruro de calcio se usa en una variedad de aplicaciones, incluyendo la deshielo de carreteras y aceras durante el invierno, la mejora de la calidad del suelo en la agricultura y el tratamiento de aguas para la eliminación de impurezas. También se utiliza en la industria alimentaria como aditivo para conservar alimentos y como agente de coagulación en la fabricación de queso. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante para asegurar un uso seguro y efectivo.